31 enero 2009

Biblia y diálogo judeocristiano

"La Comisión Bíblica no podía en su labor prescindir del contexto de nuestro presente, en el cual el impacto del Holocausto (la Shoah) ha inmergido toda la cuestión en otra luz. Se plantean dos cuestiones principales: ¿Pueden los cristianos, después de todo lo que ha ocurrido, mantener aún tranquilamente la pretensión de ser los herederos legítimos de la Biblia de Israel? ¿Pueden continuar con la interpretación cristiana de esta Biblia, o tendrían que renunciar con respeto y humildad a una pretensión que, a la luz de lo que ha ocurrido, tiene que aparecer como una intromisión? De eso depende la segunda pregunta: La presentación de los judíos y del pueblo judío que hace el mismo Nuevo Testamento, ¿no ha contribuido a crear una enemistad hacia el pueblo judío, que ha preparado la ideología de aquellos que querían eliminar a Israel? La Comisión se ha planteado las dos cuestiones. Está claro que la renuncia de los cristianos al Antiguo Testamento no sólo acabaría, como hemos indicado, con el cristianismo como tal, sino que tampoco prestaría ningún servicio a una relación positiva entre cristianos y judíos, precisamente porque les sustraería el fundamento común. Lo que hay que deducir de los hechos ocurridos es un nuevo respeto por la interpretación judía del Antiguo Testamento. El documento dice dos cosas sobre el tema. En primer lugar, constata que la lectura judía de la Biblia es «una lectura posible que está en continuidad con las sagradas Escrituras de los judíos del tiempo del segundo Templo y es análoga a la lectura cristiana, que se ha desarrollado en paralelismo con ella». Añade que los cristianos pueden aprender mucho de la exégesis judía practicada durante 2000 años; viceversa los cristianos pueden confiar en que los judíos podrán sacar provecho de las investigaciones de la exégesis cristiana. Creo que los análisis presentes ayudarán al progreso del diálogo judeocristiano, así como a la formación interior de la conciencia cristiana."

Joseph Card. Ratzinger, Presentación al documento de la Pontificia Comisión Bíblica, El pueblo judío y sus Escrituras Sagradas en la Biblia cristiana (Roma, en la fiesta de la Ascensión de Cristo, 2001) [enlace].

4 comentarios:

  1. No sé muy bien por donde andás ni que te ha ocurrido, pero se extrañan tus entradas en el blog.

    Saludos, SB

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  2. Un bache.
    Gracias por los ánimos.
    Pronto vuelvo.
    Saludos, muchos saludos.

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  3. Ya he leído sobre este tema en escritos de Ratzinger.

    Su postura, estimado Joaquín, me parece de lo más inteligente, además del respeto que me produce por venir del propio Papa.

    Un abrazo

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  4. Cierto, Morgenrot, Benedicto XVI es un Papa muy inteligente, aunque en funciones de gobierno parece que le toca inevitablemente "bailar con la más fea".

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